Plataformas elevadoras para poda: seguridad, innovación y productividad a la altura de los retos

La poda nunca ha sido solo una cuestión estética. Es una tarea esencial para garantizar la salud de los árboles, prevenir riesgos y mantener el equilibrio entre naturaleza y entorno urbano. Detrás de cada intervención hay planificación, precisión y respeto por el árbol, pero también desafíos importantes: trabajar a gran altura, en zonas con tráfico, con maquinaria pesada y condiciones cambiantes convierte este oficio en una disciplina de alto riesgo.

Más de 30 años de experiencia en el alquiler de plataformas elevadoras para poda

En mateco llevamos más de 30 años apoyando a los equipos que hacen posible este trabajo. Hemos visto cómo el sector evolucionaba desde métodos manuales y trepa tradicional con arneses a la utilización de plataformas elevadoras especializadas, que no solo incrementan la productividad, sino que reducen el riesgo y protegen el entorno. Hoy, la maquinaria de elevación no es una herramienta más: es la base sobre la que se construye la seguridad y la eficacia en cada proyecto.

Un reto que puso todo a prueba

Hace unos meses recibimos una solicitud urgente del Ayuntamiento de Valencia: podar en una sola noche una de sus avenidas más transitadas. La densidad del tráfico obligaba a concentrar toda la intervención entre el cierre de la circulación nocturna y la reapertura al amanecer. Las copas de los árboles habían sobrepasado el límite de seguridad sobre la calzada y, con el tráfico intenso del día siguiente, no había margen de error.

Plataformas sobre camión para poda urbana

Después de evaluar las necesidades del proyecto, nuestro equipo técnico-comercial se decantó por una plataforma sobre camión de 27 metros de altura de trabajo y 15 metros de alcance horizontal. Su principal ventaja era la agilidad: no necesitaba transporte especial, podía circular por la ciudad y estacionarse directamente en vía pública al estar matriculada. Así, los operarios podían desplazarse de árbol en árbol sin perder tiempo en desmontar equipos ni cortar calles secundarias.

A las once de la noche, el asfalto estaba vacío y las luces de la ciudad iluminaban el despliegue. La plataforma avanzaba sin necesidad de realizar ninguna parada, mientras un equipo en tierra retiraba restos y aseguraba que cada tramo quedara limpio antes de pasar al siguiente. A las seis de la mañana, cuando el tráfico volvió a fluir, la avenida estaba despejada, segura y lista para el nuevo día.

Seguridad en cada detalle

En arboricultura, el riesgo es inherente, pero puede minimizarse con la maquinaria adecuada. Cada plataforma de nuestra flota está diseñada con tecnologías que anticipan y previenen accidentes. En mateco contamos con distintas opciones de maquinaria para la poda, cada una con ventajas específicas que se adaptan a diferentes necesidades y entornos de trabajo:

• Controles por pedal: liberan las manos del operario para manejar sierras y herramientas, incrementando estabilidad y seguridad.
• Sistemas de bloqueo y nivelación automática: garantizan estabilidad incluso en terrenos inclinados o irregulares.
• Cestas reforzadas y protecciones integradas: minimizan daños por impacto con ramas y protegen componentes sensibles como sensores, luces y carrocería.
• Compresores de aire incorporados: permiten conectar herramientas neumáticas directamente en altura, evitando cables colgantes que pueden engancharse en ramas.
• Estabilizadores traseros independientes: facilitan el posicionamiento en calles estrechas o con desniveles de hasta el 26%.

Estas prestaciones convierten la poda en altura en una tarea más segura, eficiente y previsible. Cada máquina está diseñada para adaptarse al terreno, reducir tiempos de montaje y minimizar el impacto ambiental.

Cuando el terreno no lo pone fácil

Plataformas compactas y especializadas para poda en terrenos irregulares

No todas las intervenciones se realizan en entornos urbanos. Tras una fuerte tormenta en una zona montañosa, nos enfrentamos a otro reto: ramas caídas, árboles dañados y accesos casi imposibles. Para este proyecto fue clave una plataforma especializada para poda, mucho más ligera que los modelos estándar, con ejes nivelables y chasis protegido para impactos de ramas. Su capacidad para trabajar en inclinaciones elevadas y terrenos irregulares permitió acceder a zonas que otras máquinas no habrían alcanzado.

Este tipo de plataformas, diseñadas para maniobrar en suelos blandos y con huella reducida, son ideales para jardines históricos, parques naturales y situaciones en las que el respeto al entorno es tan importante como la seguridad del operario.

Tecnología que multiplica la productividad

Innovación en plataformas elevadoras para poda profesional

La llegada de plataformas compactas y adaptadas a escenarios específicos ha cambiado la forma de trabajar. Tareas que antes requerían varios días y equipos numerosos hoy se completan en pocas horas. Algunas plataformas sobre orugas, por ejemplo, caben por puertas de jardín de apenas 80 centímetros de ancho, lo que permite realizar podas en espacios privados sin desmontar vallados o estructuras.

Este abanico de soluciones, con equipos que alcanzan desde los 12 hasta los 40 metros de altura, hace posible afrontar tanto la poda de alineaciones urbanas como la de árboles monumentales.

Productividad al servicio del sector

Alquiler de maquinaria para poda con disponibilidad inmediata

Sabemos que cada minuto cuenta. Gracias al alquiler de plataformas elevadoras para poda, nuestros clientes tienen acceso a equipos de última generación sin necesidad de invertir en compra, mantenimiento o almacenamiento. Con más de 33 delegaciones en toda España, mateco garantiza disponibilidad inmediata y asistencia técnica para que ningún proyecto se detenga. Esta flexibilidad permite a las empresas adaptarse a campañas estacionales, atender emergencias y afrontar proyectos singulares sin costes fijos excesivos.

Elevar estándares, no solo alturas

Compromiso, seguridad y eficiencia en cada proyecto

La poda profesional ha dejado de ser un trabajo artesanal basado únicamente en la experiencia del operario. Hoy es una disciplina respaldada por tecnología avanzada, planificación y maquinaria especializada.

En mateco, nos enorgullece formar parte de esta transformación. La operación nocturna de aquella avenida es solo un ejemplo de lo que ocurre cuando combinamos experiencia, innovación y compromiso. Son proyectos que hace 30 años parecían imposibles y hoy se convierten en una realidad tangible.

Cada operario cuenta. Cada árbol cuenta. Cada intervención importa. Y cada máquina que ponemos a disposición de nuestros clientes es una inversión en seguridad, precisión y respeto por el entorno. Porque en arboricultura, elevarse no es solo alcanzar altura: son estándares, confianza y resultados.